Trump usa delantal de McDonald's en Pensilvania y critica el historial de Harris

20 de octubre (UPI) -- El expresidente Donald Trump se convirtió el domingo en empleado de McDonald's por un día en un local de Pensilvania, donde sirvió hábilmente papas fritas y realizó una conferencia de prensa improvisada. Este evento coincide con la importancia crucial de los estados indecisos a medida que se intensifica la carrera presidencial.

Durante la visita, Trump repartió comida a través del autoservicio, afirmando que la preparaba él mismo e incluso se ofreció a pagar las comidas de los clientes. Sus acciones parecen ser un movimiento estratégico para conectarse con los votantes antes de las próximas elecciones.

Mientras estaba en McDonald's, Trump operaba una máquina de freír, similar a una en la que la vicepresidenta Kamala Harris afirma haber trabajado durante su juventud en California y como estudiante de posgrado en la Universidad de Howard. Harris ha hecho referencia a su trabajo en McDonald's en campañas anteriores para realzar su atractivo para la clase trabajadora.

Trump ha cuestionado la legitimidad de las afirmaciones laborales de Harris, calificándolas de exageradas. Propuso: "Estoy buscando trabajo" mientras interactuaba con el dueño del restaurante y calificó sus narrativas como "totalmente falsas". A pesar de estos ataques, Harris ha optado en gran medida por ignorar los comentarios de Trump.

Curiosamente, la afición de Trump por McDonald's ha sido un tema constante desde su campaña presidencial original. Su reciente enfoque en la historia de la comida rápida de Harris resalta el debate político en curso sobre la autenticidad y la clase entre los candidatos.

Mientras Trump persiste en resaltar la conexión de Harris con McDonald's, su anécdota de la Convención Nacional Demócrata continúa alimentando la narrativa, lo que lleva a bromas divertidas de figuras políticas sobre qué candidato tiene una historia más sólida en la comida rápida.